No sé romper promesas,
no sé decir nunca no,
sin embargo tu no respondes,
das por hecho,
se ha de sobreentender tu palabra.
Creas castillos de arena,
promesas que flotan en el aire,
enciendes fuegos en mi corazon,
siembras semillas en mi alma,
pero no te preocupas de sus consecuencias...
aunque digas que lo haces,
porque no te importa lo más mínimo
que la marea suba y me arraste para ahogarme,
que un huracán mi existencia arrase,
que lo cosechado por ti en mi no lo cuides
y que en tu calor permanezca demasiado
y de tanto arder me abrase.
En el silencio mas absoluto,
me alimento de ilusiones que creas,
sobrevivo gracias a los buenos recuerdos
que lamentablemente rememoro acerca de ti,
olvidando el daño, las heridas y el abandono
a los que me sometes cuando no quiere saber de mi.
Me otorgas la más árida y amarga sed,
tan pronto me haces creen en algo
como me obligas a perder la fe,
tan pronto me tienes los brazos para abrigarme
como das tu consentimiento para que el frio recorra mi piel.
Y en un sendero infinito,
me hallo caminando siempre en pie,
sin descanso,
pero de tí nada sé.
Me llamas egoísta
creyendo que solo pienso en mi,
cuando realmente lo hago en los dos,
y cada dia que pasa,
de mi pensamiento te otorgo la llave,
poniendo mi dignidad a tus pies.
Dices y dices,
empujas y no sé si salir,
no sé si me voy de ti
o eres tu quien me deja,
nunca avanzas,
yo olvido y perdono
y te creo sin embago,
cuando no lo debería de hacer.
Encadenado a tu piel
yendo contigo allá donde tu quieras que esté,
que no es a todos los lados,
ya que me liberas cuando no me necsitas
pero si te conviene al sentirte solo,
no dudas un momento
en amarrarme los grilletes a mis pies.
Impensable es tu amor hacia mi,
en tus sueños, en tu día a día,
en lo mas profundo de tu ser,
me veo privado de gozar de tu cuerpo
y en tu lecho poder amenecer.
Ramos de rosas
están ahi a lo lejos,
que quizá no existan
y que ilusionandome
creo ver.
Manojos de crisantemos,
a lo largo de un pasillo
de sombras de cipreses
me son más cecanos,
y los que sean mas posiblemente
los que adornen mi cuerpo cuando repose,
si pensando de verdad en mi algun dia te dignaras
y me empezaras a querer
en vez de pensar en mi
cuando por casualidad
no te sabes en que entretener.
Y continúas bailando,
aprovechandote de los flashes de colores
que el foco de la fortuna irradia en ti...
tu sigue despertando el instinto del deseo
en esclavos sedientos de sexo en la noche
que de ti desean obtener placer...
tu sigue bailando,
como si la noche fuera eterna
olvidando que el carro de Helios
por el horizonte pueda aparecer,
aunque tienes todo predispuesto y calculado
porque cuando sus rayos te alcancen
sabes que yo seré la unica persona
que a la hora de la verdad a diferencias de muchos
(cobardes o tal vez sensatos)
te cobije ocultandote de él.
¡Cuanto desearia que cuando amaneciera
observarte sin que tu me vieras
observarte desesperado como me buscas
y te dieras por fin cuenta
que de tu interés y juego ya me cansé!
Hoy mis palabras se tiñen de rencor,
tan defraudado de ti me siento,
que ni la esperanza que tanto da de sí,
ni la inabarcable espera que te tengo
me hacen cambiar lo que ahora siento,
pero por degracia,
un solo gesto tuyo, unas palabras,
o una mirada,
me derriten por dentro
y todo lo justo que debería ser contigo
respecto al trato que me das,
consigue que el esfuerzo de dias,
el sacrificio de semanas,
se deshaga como particulas
que se pierden en la nada.
Hace 3 meses
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