La luz y la llama (23/NOV/06)

Cuando sentía que el Universo
giraba opuesto a la orbita de mi existencia,
cuando iba solo y en silencio
siguiendo el sendero hacia la muerte
y tu ni te pensaste un segundo
el poder detenerme...
quiso Dios que uno de sus angeles
ante mi hiciera acto de presencia.

No le vi aterrizar,
mas sus alas no conseguí divisar,
tomó apariencia humana
arrancandome de mi inexpresivo rostro
una sonrisa, y un par de palabras.

Me percaté en ese momento,
que olvidaba otros mundos posibles,
donde tu no tienes posibilidades,
donde hay cosas que realmente
mas que tu valen.
Olvidé pequeñas cosas,
olvidé pequeñas situaciones,
me dediqué tanto a ti
que deje de ser persona,
esclavo de tus deseos,
esclavo de tus crueldades,
esclavo de tus juegos,
esclavo de tus maldades.

Las lágrimas se las tragó el mar
aquel que también en mi alma,
engulló entre sus olas
todo el dolor
que provocaste,
lanzando tu puñal al vacío,
olvidando que una vez,
desee ser solamente tuyo.



Ya pasó, ya me heriste,
pasaste por alto que tal vez muriera...
Ya ha pasado tu huracan con fuerza,
ya no me tocas, ni me rozas,
ahora si que ya no me alcanzas.

Solo me queda resignarme
a esperar,
a lamerme mientras tanto mis heridas,
y buscar dentro de mi
ese elixir de vida
que hasta hoy creía poder hallar en ti
cuando en realidad aparentabas verdad
y albergabas puro veneno de mentiras.

Ni esperanza ni posibilidad,
ya tan solo es templanza,
ni añoranza ni fragilidad,
ya tan solo es fortaleza,
ni espera ni travesía juntos,
ya tan solo es despedida.

Ya se ha partido en dos lo que me obligaste a romper
cuando en realidad nunca ha existido tal lazo,
y ahora me vienes con deseos de estar junto a mi,
cuando solo me has dado de beber
mis propias lagrimas
y nunca el agua de tus labios.

Entre tanta sequedad,
no sé si es mas la de mis ojos
que se han quedado sin lagrimas,
o la de mi alma,
vacía de tus respuestas,
vacía de tus muestras,
vacía de algo tuyo que me dieras,
vacía ya de esperanzas
que tu mismo te encargaste de disipar.

No me digas que soy cruel
si tu siempre te has acordado de mi
cuando has querido,
cuando te has perdido a drede entre tantas sombras
sabiendo que la luz la tendrías en mi
siempre que quisieras.
No me considerado tu salida,
te has desperdigado entre oscuridades
que hacen daño, a la vez q de placer te colman,
te hieres y gozas al mismo tiempo,
pero asi no llegas a ningun lugar,
te quedas en el punto de partida;
y egoistamente me quedo esperandote
sin crecer mi interior, sin desarrollar mi persona,
renunciando a mundos alternativos
apostando por uno que nunca tendré: el tuyo.

Pierdete entre diferentes bocas,
confundete entre la sexualidad de distintos cuerpos,
pierdete entre caricias que nunca seran de amor
aquellas en las que te engañas creyendo que si lo son,
sigue viviendo en tu mentira
y entrecierra los ojos,
cuando sabes que vas al fracaso
pero te mientes como haces siempre,
la realidad es dura
y puedes cambiarla,
pero te faltan agallas para hacerlo.

Aun me pregunto la razon,
aún me preguntó porque no quiso Dios...
podría cubrirte un castillo construido por
todas las lagrimas que por ti he derramado,
todos los sueños que despierto he imaginado,
todas las ilusiones que contigo he creado,
todas las noches de insomnio que en ti he pensado.

Te corrompe mas el instinto
que el romanticismo que presumes tener
y que ya dudo si alguna vez en ti ha existido;
soltaste mi mano,
elegiste...
soltaste mi mano,
me perdiste...
soltaste mi mano,
de muerte me heriste.
pero no contaste con que
la melancolía a veces es tan fuerte
como la voz de la conciencia,
y rememorar tiempos positivos
en instantes de tristeza,
te da fuerzas para en un futuro
encontrar momentos mejores...

Solo puedo decir que el dolor de abrir los ojos
y verme perder me hace mucho mas humano...
ahora ya no soy mosquito que va al fuego
por pura fascinacion sin saber que va a quemarse,
ahora puedo distinguir entre la luz y la llama...


Ya solo veo en ti un fantasma,
un espectro, una sombra...
muy lejos de aquel chaval maravilloso
en el que este infeliz que te escribe
una vez creyó y que tu solo lo deshiciste.

Dicen que nunca es tarde para aprender ni para rectificar,
tal vez áun no sea tarde para ti...