Ya parece que todo terminó,
que el ciclo se completó
y se ha cerrado esta cadena de eslabones
donde permaneciamos tu y yo.
Y ya no pido que el tiempo se adelante,
ya no reacciono ante nada,
ni sonrio ni lloro,
mis pies caminan en un paso constante
sin ninguna meta a la que alcanzar.
Me pincho con espinas
y mis dedos no sangran,
irrumpe el invierno en mi alma
y no tengo necesidad de abrigarme,
el peligro me acecha de cerca
y no me molesto en empezar a huir
como hasta ayer siempre hacía,
y aunque la dicha me tocara con su gracia,
no cambiaría la expresion de mi cara.
¿Acaso estoy espiritualmente muerto por dentro
en un cuerpo fisico que muy al contrario
pervive en estos momentos?
Intento recordar lo nuestro,
y realmente no consigo hacerlo,
parece que nunca hubieras existido algo,
y justo lo logro ahora
cuando fue hace mucho tiempo
el momento en que desesperado lo imploraba.
No te escondes ni huyes,
actuas como si nada,
mientras tanto, yo no te maldigo
ni te bendigo nada nada,
casi roza mi estado a la indiferencia
hacia ti.
No veo el destino, ni tu futuro,
ni sé a ciencia exacta
si lo que vives en este momento
es algo real
o tan solo una esfera que disfraza
con mentiras
la realidad que deseas plasmas.
Aun asi, ves que sigues siendo
partícipe de mis versos,
parece que te conjugan
y te enlazan
alla donde vayas,
alla donde hagas lo que hagas.
Parece que has cambiado,
pero no lo has echo cuando estabas conmigo,
parece que has madurado
y vas en buen camino hacia un futuro
del que te renegabas a llegar
porque creías que nunca se te presentaría
y porque estancado era mas facil
disfrutar sobre seguro en el presente
en vez de arriesgarse a un desconocido futuro.
No te reconozco,
aunque esta es la quinta vez que te lo diga,
es cierto que en ti hace tiempo
no vi al chico del cual me enamoré,
pero ya que hablamos de entendernos,
ahora mismo no sé ni adonde voy yo
ni en que estado me encuentro.
Mis silencios los interpretas como señal
de que te echo de menos,
mi presencia aumenta tu ego y tu orgullo,
haga lo que haga, las de ganar
parece que tu siempre llevas.
Soy debil y en algun instante
prefiero regodearme aunque eso conlleve
sumergirme en el oceano del sufrimiento
pero con el salvavidas de la seguridad en mi mismo,
y mientras te observara a escondidas tuya
convencerme de si estas aferrado a la verdad
o si realmente es puro teatro lo que muestras
en realidad.
No quiero a ti enfrentarme,
pero queda algo, ¿que existe ahora
entre tu y yo?
¿que queda?
¿como se llama?
hay algo que nos une, pero si existe...
¿para que nos enlaza?
Decidí liberarme de ti
al igual que tu tardíamente
por orgullo o sensatez
tambien lo hiciste,
pero pasa el tiempo
y las heridas se curan,
pero queda "ese algo"
que por mucho que quiera negarlo
o tu nunca aceptarlo,
queda ahi, y no se marchará
hasta el final de nuestros dias.
Hace 3 meses
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