Esperanza o cambio de perspectiva

Si Pandora mantuvo la esperanza en la caja fue para demostrar que en nuestro caso, siempre hay algo que nos enlaza, para así compartir lo que no todos con nosotros pueden hacer.

Y ya no es amor ni amistad, es un vínculo curioso, especial... por más que el destino intente engañarme para que rescate lo que hubo al igual que se sabe que un barco hundido no puede volver a navergar.

Y después de hacerte el´que es más fuerte y seguro, guardé silencio, como la primera vez que decidimos estar a solas, aunque en esta ocasión no quise recordarte que yo tambien puedo resistir cualquier ataque al igual que esquivarlos e incluso defenderme con total soltura.

Y ante mi silencio a mi te acercaste, no quise mirarte a los ojos para que te dieras cuenta, esperé a observar esas puplas azules cuando estuvieras despistado y entretenido.

Aun así tu inseguridad se apoderó de ti, viste que ante tus provocaciones yo no respondía como antes solía.
No es que pretendiera darte una lección, sino más bien nublar mis sentidos y comprobar que te tenía delante. La situación era la misma, no sentía lo que antes.

No pretendía que me elogiaras ni me criticaras, tan solo me observabas mientras yo dandote la espalda hacia otro lado me dirigía.
Miré al cielo nublado, solo eso, esperando a que cayeran gotas ya que amenazaba con que hubiera lluvia.

Ya es tarde, princesa

Sabes que él nunca me convenció, y aun así intenté llevarme bien con él por ti.
Nunca me hizo mucha gracia que me vacilara, que yo le cayera mal sin ni siquiera hablar antes conmigo.
Sé que le fastidiaba que viendo como actuaba supiera como era, porque sabe muy bien jugar y burlarse de los demás pero que jamás en su vida se metan.

Y te colaste por él, y yo me quedé impactado, una de mis mejores amigas saliendo con alguien por el que no pondría la mano en el fuego. A mi me hizo daño y sus comentarios me destrozaban por dentro, y él mas que intentar solucionarlo se regodeaba de mi sufrimiento y disfrutaba como un enano viendo como mi dignidad caía por los suelos.

Me alejé de él sabiendo que también lo haría de ti, pero no pude ni aguantar tres días. Te echaba mucho de menos. Parecía que todo con el tiempo volvía a colocarse en su sitio, le di esa decimocuarta oportunidad que tu me pedías, sin estar convencido. Pero yo no puedo ser amigo de aquel que por aburrimiento daña a los demás, que no respeta sentimientos, que presume de no tenerlos y disfruta de ello.

Nunca le consideré mi amigo, solo el novio de una de mis mejores amigas, un simple conocido. Pero la cabra siempre tira para el monte, y empecé a sospechar que había gato encerrado, empecé a intuir que sucedería algo malo.

Y ahora hacéis caminos separados, no voy a decir: Te lo dije! Ni me voy a alegrar de que no estéis juntos. Ayer por teléfono te note la voz rota, es tan comprensible que ni crees lo que ha pasado, ni asimilas en el camino en el que te encuentras. Y no estas sola, mi cielo. Sonará a tópico eso de que puedes contar conmigo, que sé lo que estas pasando… pero por mucho que exprese lo q creo q sientes, jamás las palabras serán el vivo reflejo de un sentimiento.

Te quiero mi princesa, y esto no es el final. Replegate el tiempo que quieras, métete en tu caparazón y cura tus heridas con paciencia, el tiempo que haga falta, pero no olvides que si sales fuera, tienes a gentecilla que te escoltará y te cuidará allá donde te dirijas. Aunque creas que jamás podrás salir adelante, es tan solo tu pesimismo que se incrementa porque la soledad es así de majadera, has salido de cosas peores, y muy pronto lograremos robar la sonrisa a la más bella de mis princesas.

No sé pronunciar palabras

¿Qué se puede escribir cuando no sabes ni que decir?
¿Qué puedo escribir cuando siento mil y un sentimientos dentro de mí, tan contradictorios, que me elevan y me descienden como si de una montaña rusa se tratara?
¿Qué palabra podría hora mismo definir mi estado de ánimo si no sé qué me deparara el día a día?

¿Qué le puedo decir a la luna en a noche mientras la contemplo en la desnudez de mi cuerpo?
Mirarla, pero no saber que decir.
Sentir, y no saber el qué.
Callar, no saber que expresar.
Mirar, tan solo, contemplar y dejar que mis entrañas respondan si ante a algún estimulo comienzan a darme calor, que calienta pero no me quema.

Y sale de nuevo el sol, todo se ilumina, no hay sombras donde esconderme y poder descansar.
Sale, y yo he de salir a enfrentarme al mundo, a dar la cara…
Sale, y tan solo mi esperanza pervive, coronando mi cabeza, mientras mi inseguridad me hace zancadillas y el miedo me hace sentir pequeño.

¿Acaso hay alguien que no se merezca amar y ser correspondido?
¿Acaso unos mas que otros se lo merecen más?
¿Quién decide eso?
¿Con qué derecho se considera capacitado para poder permitirlo?
¿Quién es el que se cree imparcial, si antes de que empiece el juego, ya sabe a quien le facilitará las cosas para ganar?

En el Madrid de los Austrias...

Parecia que nunca iba a suceder,
parecia que nunca uno retornaria
y otro del mismo sitio se alejaría...

Desde hace apenas una semana
recorres las mismas calles
que hasta hace unos meses yo lo hacía...
Recorres esas calles donde deambulaba sintiendome incompleto,
añorando la otra parte mía,
que en ti se hallaba,
que en tí residía.

Y ya no pasamos de un: "hola",
quedan hilos de por medio
que parece que al rozarse
nos devuelven una descarga electrica...
puede que sea miedo,
puede que sea
por sentirnos desorientados, perdidos...
pero lo que está claro
es que ninguno de los dos
queremos echarnos al olvido.

Y sé,
algo me dice,
que ya habrás estado ese arco...
y sé,
algo me dice,
que aunque sepas que ahi no estoy,
has mirado desde abajo hacia lo alto... buscandome, haciendo el intento frustrado de hallarme aun sabiendo que no aparecería.

Y sabes,
algo te lo dice,
que yo ahi he estado en tu ausencia...
Y sabes,
algo te lo dice,
que tambien te esperaba...
Y sabes,
algo te lo dice,
que un dia de estos que quedan por llegar,
volverás a ocupar el sitio en que te hallas
y en esa ocasion,
si apareceré yo...
se te dibujará en la cara una sonrisa
cuando nuestras almas se reconozcan
y solo entonces hablen nuestras pupilas.

POESIA Y MELODIA

Apolo me concedió el don de las letras
mientras que a ti te dotó con el de la musica.

Dulce y embriagante melodía surgiría
a traves de mis palabras emotivas
y tus acordes en madrugada herida.

Quizá un debil susurro tuyo
rompa el silencio de mis colosales tristezas,
puede que una simple mirada
exprese el deseo que cualquier palabra
cuidadosamente escogida .

Ya no me baila el gusano en la tripa

¿Por qué parece que no te reconociera cuando paso por tu lado?
¿Por qué parece que no te conociera cuando sé más de ti que tu mismo?
¿Por qué te miro y nada en mi se inmuta?
¿Por qué te observo y no siento nada cuando antes era verte
y me sentía feliz como ave en el cielo?
¿Por qué te observo y mi pensamiento no cambia cuando antes era escucharte
y nada más me importaba en ese momento?

No somos como dos extraños porque ya compartimos lo que una vez hubo,
quizá haya preguntas que aun no te he dicho
y aun así no tengo intención de formulártelas.
quizá haya respuestas que en su día deseara,
y hoy sin embargo no me importan nada.

No se ha apagado la llama
o definitivamente la abandonamos
conscientes de que era mejor
que se extinguiera su fuego,
no tenemos intención de reavivarlo,
no tenemos intención de lo nuestro salvarlo.

Y aun así formas parte
de la trayectoria de mi vida,
por mas que mi cerebro intente olvidarlo
el recuerdo de la melancolía siempre está presente.

Y fuiste en su día el futuro que deseaba,
para convertirte en mi presente,
sin embargo te quedaste parado
y no me acompañaste en mis pasos,
puede ser que nos crucemos varias veces mañana
pero nunca juntos volveremos a recorrer el mismo sendero.

SIN NOTICIAS DE ORFEO

Quizá parezca que lo que vivi al otro lado del Atlántico fuera un sueño y que de ser tan bueno solo pudiera encajar al considerarlo un sueño. No siempre la realidad permite que la ilusion sea un deseo que se cumpla cuando todo parece interponerse para que no disfrutes de todo aquello.

Quizá lograste pararme, hasta frenarme por si me desbordaba hacia lugares de donde jamás pudiera retornar.

Quizá tus palabras eran como la melodia de la flauta de Orfeo que adormeció a todos hasta que me rescataste de los infiernos. Y a dia de hoy, te pido que por favor no vuelvas la cabeza, solo confia en mi voz, te sigo, aunque no puedas verme.
Aun nos queda mucho camino hasta que del Averno lleguemos a los Campos Elíseos, mientras tanto tenemos permiso de Hades para permanecer en el mundo de los mortales con la duda de si he perecido o mas bien se me ha devuelto la vida de nuevo.



Echo de menos a las ninfas bailar en su escenario natural,
echo de menos a Apolo cuidando de su rebaño a la vez que conduce el carro de fuego,
echo de menos a Artemisa mientras caza despejada de sus ropas
con la luna curando las heridas
mientras su luz toca su piel,
echo de menos a Hermes de aqui para állá con mensajes
mientras mueve sus pies alados,
echo de menos Poseidon cuando con su tridente
provoca las olas que en las playas
proceden del trascendente e inmenso mar.


Echo de menos ese tiempo clásico
que aunque muchos lo ignoren, aun existe
que aunque muchos lo den por acabado, aun perdura
donde siempre se pudo coexistir en armonía
donde siempre nos sumergimos
cuando otros en la noche simplemente duermen
cuando otros en la noche simplemente lo olvidan.